lunes, 19 de noviembre de 2012

El rococó



El Rococó es un movimiento artístico nacido en Francia, que se desarrolla de forma progresiva entre aproximadamente los años 1730 y 1760.
El rococó es definido como un arte individualista, antiformalista y cortesano. Se caracteriza por el gusto por los colores luminosos, suaves y claros. Predominan las formas inspiradas en la naturaleza, la mitología, la belleza de los cuerpos desnudos, el arte oriental y especialmente en los temas galantes y amorosos. Es un arte básicamente mundano, sin influencias religiosas, que trata temas de la vida diaria y las relaciones humanas, un estilo que busca reflejar lo que es agradable, refinado, exótico y sensual.
Ejemplo del rococó en El Salvador


Salón Rosado, Palacio Nacional



Salón Amarillo, Palacio Nacional


Salón Azul, Palacio Nacional


El Manierismo




Origen y características de Manierismo
El manierismo es el nombre que se da al estilo artístico que se inicia en Italia en la tercera década del siglo XVI, y que se intuye en las últimas obras de Miguel Ángel y de Rafael (como en la Piedad Rondanini)
Es el momento en que se pierde lo más propio del clasicismo y la belleza clásica: proporciones, armonía, serenidad, equilibrio.
El manierismo es subjetivo, inestable. Los artistas se dejan llevar por sus gustos, alejándose de lo verosímil, tendiendo a la irrealidad y a la abstracción. Se prefiere, en escultura sobre todo, la línea o figura serpentinata, en que las figuras se disponen en sentido helicoidal ascendente.

El Renacimiento



El Renacimiento se refiere a un amplio movimiento cultural que nación en Europa en los siglos XV y XVI que se desarrollo en el arte, así como también en la ciencia natural y humana.
Este movimiento debe su nombre a que se retoman ciertos elementos de la cultura clásica y en el que se difusiona el humanismo logrando así un renacimiento para el hombre que se encontraba sumido en una mentalidad dogmática, brinda al ser humano el creciente interés por el arte, política y ciencia haciéndolo más consciente de lo que sucede a su alrededor.

Renacimiento temprano
Primer Renacimiento, Renacimiento primitivo, Proto-Renacimiento, Protorrenacimiento, Renacimiento temprano o Renacimiento inicial son términos equívocos, aunque muy utilizados en la historiografía del arte y otros ámbitos de la historia de la cultura;y pueden designar tanto al primer periodo del Renacimiento o Quattrocento (años mil cuatrocientos en idioma italiano, es decir, al siglo XV), como a otros periodos que pueden calificarse de precursores del Renacimiento oPrerrenacimiento, tanto en Italia como en otros lugares, y tanto en siglos cercanos (el siglo XIII -Duecento- o el siglo XIV -Trecento-) como en momentos más alejados, particularmente el Renacimiento carolingio (siglo VIII - siglo IX) o el denominado Renacimiento del siglo XII.
El principal exponente del renacimiento temprano fue Donatello quien es denominado como padre del renacimiento junto con otros artistas de la época.





Alto Renacimiento, Renacimiento maduro, Renacimiento pleno o Renacimiento clásico es el periodo culminante del Renacimiento, que comprende los años finales del siglo XV y las primeras décadas del siglo XVI. Pueden utilizarse como hitos históricos para delimitarlo el descubrimiento de América (1492) y el saco de Roma(1527); y como hitos artísticos, para iniciarlo La Última Cena de Leonardo da Vinci (1495-1497) y para terminarlo la muerte del propio Leonardo (1519), la de Rafael Sanzio (1520) o una obra culminante del tercero de los grandes protagonistas del periodo: la Capilla Medicea de Miguel Ángel (1520-1534).









Bajo Renacimiento es una expresión utilizada por la historiografía para designar a una fase dentro del Renacimiento, pero que no ha alcanzado una definición unívoca, y se utiliza de forma contradictoria en distintos textos, incluso en la bibliografía especializada.

El Alto Renacimiento, en cambio, es un periodo cuya identificación es habitualmente más clara: el periodo de finales del siglo XV y comienzos del siglo XVI (como fecha más clara, hasta 1527 -saco de Roma-).
La utilización de periodos bajos y altos, en general, se hace para marcar un periodo alto anterior al bajo, habitualmente para calificar al primero de fase de auge o esplendor, y el segundo de fase decadente, siguiendo la tradicional concepción cíclica de la periodización histórica que en arte desarrolló, entre otros, Eugenio D'Ors. Responde a esa convención, las parejas de términos Alto Imperio romano y Bajo Imperio romano; Alta Edad media y Baja Edad Media, etc. De esa manera, bajo renacimiento sería el renacimiento tardío o renacimiento final.